Izquierda Unida - León

IU exige de nuevo que la auditoría ya presentada en el Ayuntamiento se haga pública. Exigimos todavía más que sus conclusiones se presenten junto a un Plan de Viabilidad a 4 años que reduzca de verdad la deuda de 550 millones y que dicho Plan incorpore otro de Inversiones en los barrios vigente durante toda la legislatura; aprobado por los vecinos y vecinas de León.

Reiteramos nuestra denuncia del chantaje de los bancos a los leoneses. Cambiar créditos por generar paro en el consistorio es una felonía de alta categoría que no puede consentirse.

IU tiene claro que la venta irracional de patrimonio, revisar el IBI beneficiando a los grandes propietarios de viviendas desocupadas (quienes menos servicios disfrutan), el copago y el efecto de las privatizaciones es justo lo que no debe hacerse y la principal causa de la deuda municipal.

Por este motivo y conociendo el historial del PP y del PSOE a la hora de imponer arbitrariamente sus caprichos incorporamos que el Plan de Viabilidad está vacío sin un proyecto de inversiones aprobado, asegurada su financiación, y consensuado con cada vecino y vecina de la ciudad. El futuro de la ciudad dependerá en gran medida de la implicación ciudadana en la gestión municipal, el control que ejerza sobre el Alcalde y su Equipo y la capacidad para detectar necesidades que influyan en la marcha diaria del Ayuntamiento.

La transparencia es fundamental y un Plan de Inversiones en los barrios; desde los servicios sociales hasta las mejora de las aceras, durante toda la legislatura debe aprobarse junto al próximo presupuesto, de forma plurianual y aprobado de modo participado por la ciudadanía de León.

Las prioridades de los barrios en todas las materias deberán conocerse de un modo directo; en Concejos de Barrios abiertos a todos los ciudadanos y colectivos del municipio, quienes propondrán, debatirán y aprobarán cada inversión necesaria en la ciudad. Los presupuestos hasta 2015 deben conocerse y legitimarse por la ciudadanía, prever las prioridades desde 2012 y no dar sorpresas mientras los vecinos hacen efectivos sus deberes de ciudadanía y ejecutan sus derechos; impidiendo que los caprichos de otro alcalde puedan volver a multiplicar la deuda de nuevo a costa de quienes vivimos en León.