Izquierda Unida - León

IU considera un acto de servilismo sin precedentes en León aceptar como cosa hecha las políticas del PP que ponen a los Ayuntamientos ante el paredón cuando el Tribunal Constitucional ya cuestiona la Ley de Reforma de la Administración Local y el bipartidismo está herido de muerte tras el 25M. Proponemos un modelo progresista para fijar el cobro del IBI, que trasladaremos a las alegaciones relativas a la reforma propuesta por el Equipo de Gobierno y exigimos la paralización de cualquier tipo de aplicación de la Ley de Racionalización y Sostenibilidad de la Administración local mientras no decida el Tribunal Constitucional, o cambie de una vez el gobierno y sea revocada.

Aceptar acríticamente una atrocidad social de una bajeza moral extrema y justificación tan deficiente como defender la esclavitud, como es que los servicios que se pagan con impuestos, para repartir la riqueza y ofrecer un modelo social justo a la gente, deban autofinanciarse en 2018; tan solo demuestra que poco le importa al PP lo que ocurra más allá de 2015 y que además de expulsar a las personas de estos servicios, porque no podrán pagarlos, reservarán los ingresos por las subida del IBI y otras tasas e impuestos para generar negocio a los amigos del alcalde de turno en forma de gestión privada de los servicios básicos. La basura y la limpieza llevan este mismo camino no lo olvidemos.

El anuncio de nuevas medidas de contención del gasto en un próximo pleno municipal y la aprobación de un nuevo Plan de ajuste a cambio de convertir en deuda financiera los 175 millones del ICO anuncian lo que IU lleva denunciando desde hace dos años, se retrasa el hachazo (20 años y 4 más de carencia) pero se pone la alfombra roja para subir tasas, recortar servicios o eliminarlos y terminar de una vez con la liquidación iniciada al robar la autonomía local y la capacidad de decisión financiera tras la intervención del Ministerio y la Junta del Ayuntamiento de León. Que no puede tomar ni una sola decisión sin el permiso de estas administraciones. Eso es inconstitucional y contrario a la necesidad de tener un ayuntamiento cercano al servicio ciudadano. Que ya no lo está.

Para finalizar denunciar que León pretende ser pionero en el proyecto de barrios de primera y de segunda del PP. Revisar el IBI para reducir o incrementarlo en relación con el nuevo valor catastral de los 130.000 inmuebles de la ciudad es bueno pero no desde esta perspectiva. Al final los barrios con más servicios serán los más caros y elitistas y los que simplemente no los tienen quedarán para asegurar una nueva segregación por clases sociales. IU apuesta por un modelo progresista que tenga en cuenta el valor catastral para variar el coeficiente fijado por el Ayuntamiento bajándolo para los inmuebles más baratos e incrementándolo para las viviendas más caras. De este modo los ingresos podrán incrementarse de forma proporcional, asegurando que los más pudientes paguen más, y estos ingresos se podrán destinar a asegurar el bienestar ciudadano donde más se necesite. Nunca discriminando a barrios enteros, como ahora y al parecer con mayor gravedad, sino para asegurar servicios en todos los barrios, contando con la ciudadanía y huyendo de experimentos con gaseosa.