Izquierda Unida - León

El Coordinador Provincial de IU, Santiago Ordóñez, considera una indecencia que un día antes de empezar a negociar el ERE que puede echar  ala calle a más de 1500 personas la antigua Caja España, integrada en el Banco CEISS, comience a cerrar oficinas y despedir gente.

30 oficinas de las 263 previstas y 100 despidos de los más de 1500 que representan una maniobra clara para amedrentar a los representantes de los trabajadores que sufren como los clientes y la ciudadanía que paga su rescate las consecuencias de la política de rapiña perpetrada por los directivos y altos responsables de la Caja durante los últimos años.

El uso para intereses partidistas y personales de la Caja, ligado a la bancarización que supuso involucrarse en la especulación inmobiliaria han supuesto que León pierda su caja, los leoneses y leonesas su obra social y esperemos que no se llegue a tocar a largo plazo el patrimonio de la misma.

Lo que nos falta por sufrir es que vendan Botines y se lleven el edificio piedra a piedra junto a los miles de parados que generará la sinvergonzonería que ha envuelto la gestión de Caja España todo este tiempo. PP y PSOE, junto a otros elementos sospechosos, han impuesto presidentes, aprobado créditos, despedido y recontratado altísimos responsables, mientras jugaban al monopoly del ladrillo con el resultado previsto. La ruina y el robo de la Caja que era una de las pocas herramientas de progreso para la provincia de León.

Por otro lado IU muestra su solidaridad con la plantilla de Antibióticos, que inicia una concentración delante de la fábrica en estos momentos, y reitera que estamos a la espera de respuesta a la iniciativas presentadas en el Congreso y Las Cortes exigiendo la implicación de ambas administraciones en la salida de la familia Pucci del accionariado.