viernes, 17 de septiembre de 2010

SEMANA DE LA MOVILIDAD Y PLAN DE LEON

IU LAMENTA QUE EL PLAN DE MOVILIDAD SOSTENIBLE DE LEON SE LIMITE A ENCAJAR EL TRANVIA Y LA INTEGRACION DE FEVE LA TRAMA URBANA. TAMBIEN CENSURAMOS EL ABANDONO DEFINITIVO DE UNA AGENDA LOCAL 21 SERIA Y EL PISOTEO CONSTANTE DE LA PARTICIPACION CIUDADANA.

La presentación del día sin coches ha obviado el proyecto de privatización de toda la política movilidad que maneja el Equipo de Gobierno desde agosto de 2008 y ha demostrado que cualquier cosa es movilidad para el Concejal incluso si es totalmente contraria a un modelo sostenible. Los aparcamientos en cualquier lado no son movilidad sostenible, la ronda interior no es movilidad sostenible, el Plan E en Papalaguinda no es movilidad sostenible, el cruce de Michaisa no es movilidad sostenible, Fernández Ladreda y Mariano Andrés no son movilidad sostenible, ampliar la ORA sin control ni diseño no es movilidad sostenible. El Equipo de Gobierno es la imagen de la contradicción y la ignorancia, cualquier cosa que tenga que ver con tráfico les vale y eso simplemente no es cierto.

Las medidas indispensables para cualquier Plan de este estilo se tratan como un “daño colateral” del Plan de Movilidas. Las iniciativas relativas a movilidad y tranvía se han presentado ante la prensa a espaldas de las Mesas de Movilidad creadas para debatir estos mismos proyectos. La integración de FEVE y el tranvía se han incorporado al Plan de Movilidad pero mantienen su diseño anterior al acuerdo queb permitió incorporar a FEVE al proyecto del tren de superficie. Se han gastado 300.000 euros en un Plan que no sirve, es una acumulación de proyectos aislado y debe modificarse por anacrónico.

Lo peor de todo es que con este comportamiento se hiere de muerte al documento de desarrollo social y económico más importante de cualquier ciudad por detrás del PGOU, la Agenda Local 21, tan fundamental en el futuro de cualquier ciudad como el propio planeamiento urbanístico, que ha sido relegada al ostracismo y condenada a asumir las conclusiones cerradas de un trabajo paralelo y parcial. La Agenda y el PGOU están interrelacionados, son complementarios, uno contrapeso del otro y por ello el Plan de Movilidad debe incorporarse al Plan de Acción de la Agenda 21 como una de sus partes fundamentales. Es más el Plan de Movilidad en cualquier ciudad con un Equipo de Gobierno Informado parte de las conclusiones de la Agenda Local 21 y no viceversa. Además, si la Agenda 21 es paradigma en la participación ciudadana, los anuncios del equipo de Gobierno PSOE-UPL son ejemplo de opacidad y pisoteo de la participación. Se han creado mesas de movilidad con organizaciones sociales que no se reúnen, nos enteramos por la prensa de las iniciativas sobre las que debemos opinar.

El Ayuntamiento impone un nuevo sistema de transporte público para conectar las diversas zonas de la ciudad pero se obvia la reorganización del deficiente servicio de autobús. El carril-bici o los aparcamientos disuasorios pasan a ser elementos secundarios que se iban a perfilar una vez se diseñe la operación urbanística de integración de la línea de FEVE y el paso del tranvía, que no se ha hecho. El Plan de Movilidad sigue los criterios políticos del Equipo de Gobierno PSOE-UPL, diseñando un modelo de movilidad falso y contradictorio. Que te da una de cal y otra de arena, con la consecuencia de ir por buen camino en unos barrios a costa de sacrificar otros.

Además el tranvía, salvo su tramo inicial hacia los Hospitales y la Universidad, es un trazo norte-sur que no comunica los barrios periféricos con el centro y viceversa, no parece mejorar el sistema de transporte público. Menos aún con las líneas de autobús completamente abandonadas.

IU no está en contra de la implantación del tranvía, apoya la ejecución de la primera fase, ni siquiera vamos a recordar que es un proyecto electoralista utilizado por el PSOE en muchas ciudades tras el éxito que le dio al caído en desgracia alcalde de Parla, tan solo somos objetivos cuando dejamos claro que la Movilidad Urbana sostenible no se debe confundir con operaciones urbanísticas o colocar con calzador un tranvía cuando necesitamos reordenar el servicio de autobuses, apostar por el hidrógeno y la electricidad para la flota municipal.

El carril bici, los aparcamientos disuasorios, los itinerarios peatonales no pueden complementar la “transformación que supondrá la implantación del sistema tranviario de León y las integraciones ferroviarias de ALTA VELOCIDAD (transporte colectivo famoso por su insostenibilidad ambiental) y FEVE en el sistema urbanístico”. Actuaciones prioritarias para IU que nada tienen que ver con la movilidad en sí salvo si se desarrollan en coherencia con la Agenda 21.

Nos da mucha pena que un instrumento fundamental como la Agenda Local 21 quede en estas condiciones porque el Equipo de Gobierno PSOE-UPL no ha querido redactar un verdadero Plan de Movilidad Sostenible.

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