Izquierda Unida - León

A mediados de la semana pasada se hizo público un comunicado de prensa desde la organización juvenil del Partido Popular, las Nuevas Generaciones (NNGG). En él daban su opinión acerca de las bondades que ha traído la subida de la nota de corte para percibir becas universitarias.

Desde el Área de Juventud de Izquierda Unida han contestado a la información remitida desde NNGG argumentando que “debido a la brutal subida de los precios del crédito (en torno a un 50% en los dos últimos años en Castilla y León), se ha observado un detrimento en el número de créditos en los que se matriculan los alumnos, a pesar de que el número de estudiantes haya subido. Esto ha hecho subir la nota media por un simple motivo. Ante la posibilidad, por remota que sea, de suspender una asignatura, un joven no se arriesga a cursarla por miedo a tener que pagar una segunda, tercera o cuarta matrícula al año siguiente, pudiendo sobrepasar en este caso de los 1000€ el coste de una única asignatura. Por tanto, a menos asignaturas suspensas, mejor nota media, aunque ficticia”. Por otra parte, han añadido que “aunque la partida presupuestaria para becas haya aumentado, el montante efectivo se ha visto reducido por causa del edurecimiento de las condiciones para poder recibir la ayuda, y de la disminución de su cuantía. Por tanto, el argumento de que nunca ha habido un presupuesto mayor en ayudas al estudio no es más que una falacia con el único objetivo de engañar a la sociedad”. También han denunciado que, a pesar de estar en la recta final del curso, aún no se ha hecho entrega a algunos beneficiarios de parte o el total de la beca.

El responsable de universidad de los jóvenes de la coalición de izquierdas, Ricardo Rodríguez, ha pedido a NNGG que “antes de hacer declaraciones de este calado, se preocupen un poco de comprobar in situ, con las y los estudiantes, las consecuencias de las políticas de su partido”. También ha calificado de “erróneo el concepto que tiene el PP y sus jóvenes sobre lo que es una beca. Una beca no es un premio a la excelencia, sino una ayuda destinada a reducir las desigualdades socioeconómicas en el acceso a la educación”. Por último ha señalado “que la desvirtuación delas becas con este tipo de políticas sólo lleva a que tengamos una universidad clasista, donde se penaliza a quienes tienen que ceder parte importante de su tiempo de estudio para trabajar para poder costearse la carrera exigiéndoles una nota que, precisamente por tener una situación menos ventajosa, no pueden alcanzar”.